Cómo establecer un plan de entrenamiento sólido para la postemporada
Ahhh. La postemporada. Tiempo para dormir hasta tarde, olvidarse del entrenamiento y comer lo que quieras... ¡No tan rápido! Antes que nada, SÍ, reducir la carga de trabajo en la postemporada es imprescindible. Es hora de distribuir la carga mediante una adaptación inteligente y permitir que se produzca la recuperación física, mental y emocional. Pero simplemente tomarse meses libres sin un plan ni una estructura saboteará el potencial del próximo año. Muchos atletas se encuentran pasando la mayor parte del nuevo año intentando simplemente recuperar lo que han perdido. Seamos claros en una cosa: es postemporada y luego es pretemporada. No existe
la pretemporada . No se puede tener éxito tomándose semanas y meses libres de toda actividad. Normalmente, los atletas planean tomarse un tiempo libre muy necesario. Sin embargo, sin una estructura establecida, lo que se pretendía que fueran unas pocas semanas de sesiones ligeras se convierte en unos pocos meses. Muchos atletas se encuentran a mediados de enero con un nivel de condición física muy reducido y confundidos sobre cómo lo lograron. No puedes construir sobre una base si has permitido que se deteriore irreparablemente. Primero tendrás que reconstruirla, lo que deja poco tiempo para construir una temporada exitosa sobre ella. Si bien la postemporada no conlleva mucho estrés ni carga, hay aspectos específicos que debes lograr para prepararte para el éxito. Tu enfoque inicial durante la postemporada debería ser el siguiente:
- Al principio, un descanso total de la estructura, las carreras y el entrenamiento. Mantente activo, pero no "entrenes". No se permiten dispositivos. No intentes alcanzar zonas de entrenamiento, ritmo, potencia ni frecuencia cardíaca. Simplemente, sé. Disfruta de la libertad. Reconecta con la sensación de estar activo.
- Permite la sanación. Menos estrés, menos cargas. Más nutrición. Más descanso. Más recuperación. Acéptalo.
- Evite acumular fatiga. La fatiga será contraproducente para los puntos anteriores y limitará su crecimiento.
Después de un par de semanas de lo anterior, es hora de retomar el entrenamiento con calma. Pero DEBEMOS enfocarnos correctamente. No retomamos el mismo entrenamiento que hacíamos antes de nuestra última gran carrera o evento. El enfoque ahora es completamente diferente. Ahora nuestro enfoque es:
- Fortalece tu cuerpo. Sienta las bases de fuerza, técnica y desarrollo que le permitirán a tu cuerpo aceptar y sobresalir bajo las altas cargas de entrenamiento que llegarán en primavera. Esto incluye mejoras en la fuerza y la aptitud funcional, así como mejoras técnicas en todas tus disciplinas. ¡Ten paciencia!
- No acumules fatiga en esta fase. Escucha a tu cuerpo.
- Mantén una vida equilibrada. Este es el momento de asegurarte de dedicar el tiempo necesario a otras actividades de tu vida: familia, carrera, amigos, aficiones, etc.
- Establezca hábitos positivos que serán la base para mejorar el rendimiento: comprométase a cargar combustible después de cada entrenamiento (¡tome su barra PROMAX favorita!); comprométase a descansar y recuperarse adecuadamente; y comprométase a mantener una buena nutrición durante todo el día.
Tu éxito en 2016 dependerá directamente de tu capacidad para hacer estas cosas. Lo último, y quizás lo más importante, es COMPROMETERTE. Comprométete con el entrenamiento. Si bien una sesión de entrenamiento que te deja completamente agotado después es genial, el atleta que vive de eso rara vez mantiene la constancia en esos esfuerzos. Lo cierto es que esforzarse al 80 % día a día es mucho más valioso a largo plazo. Comprométete con sesiones de entrenamiento frecuentes, pero más cortas. Sigue participando.
El éxito se logra con constancia. Día a día, semana a semana y temporada a temporada.