La nutrición, un horario de sueño adecuado y mantenerse hidratado son elementos importantes para mantener un cuerpo sano. Una buena comida puede ser muy útil, pero a veces es necesario ajustarla y añadir una barra de proteína o algo similar a tu rutina diaria para aumentar tu energía. Al igual que ajustas tu dieta, es posible que necesites ajustar tu forma y postura al hacer ejercicio, no solo para no lesionarte, sino también para aprovechar al máximo tu entrenamiento.
Importancia de la postura
Una mala postura no solo es poco atractiva, sino que también puede ser perjudicial para la salud, y no solo para la espalda. La estructura de tu cuerpo se desarrolló así porque tiene una función específica. Sí, te permite realizar actividades específicas, pero también te protege. Piensa en tu caja torácica. Está diseñada para proteger tus órganos internos de lesiones. Dado que el cuerpo humano es tan asombroso, no solo depende de la caja torácica, sino también de otros elementos. Por ejemplo, cuando entras en shock, tus extremidades se enfrían porque tu cuerpo detecta una emergencia y está desviando toda la energía hacia tus órganos. Del mismo modo, cuando no tienes una buena postura, tus órganos pueden estar sometidos a una presión innecesaria. Esto significa que no recibirás la cantidad adecuada de oxígeno, flujo sanguíneo y otras funciones que tu cuerpo intenta realizar para mantenerte sano. Al hacer ejercicio, una mala postura provoca una posición incorrecta de los órganos, por lo que puede que no sea solo tu espalda la que estés lesionando. Cuando se trata de hacer ejercicio, una postura adecuada ayuda al cuerpo a distribuir uniformemente los pesos y la presión para que las áreas que intenta trabajar obtengan el máximo beneficio en lugar de causar lesiones.
Importancia de la forma
Considera tu postura como la base de todo lo que haces, y tu forma como la gestión de todos los detalles intermedios. Cuando entrenas y tu entrenador te dice que ajustes tu forma, no se trata solo de ser estricto, sino de asegurarte de obtener los beneficios que buscas. Por ejemplo, las sentadillas pueden parecer más fáciles cuando las rodillas giran hacia adentro, pero, en todo caso, deben estar más orientadas hacia afuera. Esto permite que el peso caiga donde debe, en lugar de que la espalda y las rodillas soporten toda la presión de la sentadilla. Un error común es bloquear las articulaciones. Esto es peligroso por varias razones. Por un lado, hay arterias importantes en esas zonas, así que si bloqueas las rodillas demasiado tiempo, puedes desmayarte o perder la visión. Como mínimo, estás sometiendo a un esfuerzo innecesario a tu corazón. También significa que las pesas o los ejercicios que estás haciendo están forzando las articulaciones en lugar de trabajar los músculos. Antes de tu próximo entrenamiento, habla con tu entrenador. Pide consejos para mejorar tu forma física y tu postura en general. Toda actividad que realices puede beneficiar a tu cuerpo si la forma y la postura se gestionan correctamente. Y no olvides complementar tu entrenamiento mejorado con una deliciosa barrita de proteína Promax .