1. ¡DESPIERTA TEMPRANO! Me encanta terminar mi entrenamiento antes de tener tiempo de convencerme de no hacerlo, antes de que haga demasiado calor, ¡antes de que mi vida ajetreada me invada! Empezar el día con un entrenamiento rápido es una inyección de energía fantástica porque todas las endorfinas que envías a tu cerebro gritan "¡Oye! ¡Despierta! ¡Que tengas un día genial!"
2. ¡BEBE MUCHA AGUA Y LLÉVATE DE ENERGÍA ANTES Y DESPUÉS DEL ENTRENAMIENTO! Beber un vaso grande (225-475 ml) de agua fría a primera hora de la mañana es una excelente manera de activar tu metabolismo y purificar tu sistema. Esto facilita la absorción de nutrientes y hace que tu piel brille. Además, asegúrate de consumir la cantidad adecuada de proteínas y carbohidratos antes y después del entrenamiento para aprovechar al máximo tu sesión de ejercicio. Siempre tomo media barrita Promax LS antes y después del entrenamiento.
3. ¡CAMBIA TUS ENTRENAMIENTOS! Aprovecha el verano haciendo nuevas caminatas, navegando en kayak por lagos que nunca has visitado o llevando tu bicicleta o patines en línea a una aventura. Cambiar tus entrenamientos te recordará que entrenar debe ser divertido y evitará que te aburras.