Consejos para mantenerse físicamente en forma y motivado durante los meses de verano
Hacer ejercicio durante los meses más calurosos del verano puede hacer que quieras aislarte y evitar salir hasta el otoño. Sin embargo, con algunos pequeños ajustes, puedes mantener tus rutinas y mantenerte en forma. Si vas a entrenar al aire libre, deberás evitar las horas más calurosas del día, que van desde las 11 a. m. hasta las 5 p. m. Se recomienda entrenar temprano por la mañana antes de ir a trabajar. No solo hace mucho más fresco afuera, sino que tu cuerpo tendrá más energía y un mejor funcionamiento cognitivo durante todo el día. Si no puedes realizar tus rutinas a esta hora, considera hacerlas por la noche después de que el sol se haya puesto. Si eres noctámbulo, incluso podrías entrenar por la noche, cuando hace mucho más fresco. Recuerda usar ropa reflectante, de colores brillantes o blanca, y llevar una linterna para que los conductores te vean mejor. Una alternativa viable para entrenar en verano es pasar más tiempo nadando y en la piscina. Hay muchos ejercicios de acondicionamiento físico acuáticos que puedes realizar para mantener y mejorar tus habilidades. Independientemente de las rutinas al aire libre que prefieras, recuerda aplicarte abundante protector solar y reaplicarlo con frecuencia para proteger tu piel. También deberías usar una gorra de béisbol para protegerte los ojos y gafas de sol con protección UV. Tómate tu tiempo para rehidratarte mientras haces ejercicio bebiendo abundante agua. La mayoría de la gente recomienda beber un poco cada quince minutos. Si simplemente no soportas el calor del exterior, busca un gimnasio o centro de fitness en tu zona que ofrezca membresías de verano a corto plazo. Estas instalaciones ofrecen la comodidad del aire acondicionado y acceso a una amplia gama de equipos que puedes usar para asegurarte de que todo tu cuerpo reciba la atención que necesita.
Si le resulta difícil mantenerse motivado, incluso con estas diversas opciones, intente implementar estos consejos:
- Comienza a escuchar música para animarte y motivarte a hacer ejercicio.
- Tómate un tiempo para recompensarte por alcanzar tus metas de fitness. Programa un masaje, ve de compras, tómate un día libre o haz lo que quieras.
- Establece metas fáciles de alcanzar. Durante los meses de verano, conviene ajustar tus objetivos a corto y largo plazo. Puede ser más difícil exigirle más a tu cuerpo y, si no lo logras, puedes desanimarte y perder la motivación. Por ejemplo, si tu objetivo a corto plazo es bajar 4.5 kg en un mes, podrías ajustarlo a perder al menos 450 g por semana durante 10 semanas.
- No te castigues si no haces ejercicio durante uno o dos días. Si simplemente hace demasiado calor afuera y necesitas quedarte en casa, no te sientas culpable. En su lugar, haz flexiones, abdominales o limpia la casa para hacer algo de actividad física.
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